Por motivos variados, parece que esta vez si que me he pasado a la hora de actualizar el blog, así que he preparado un resumen de la recta final del mes. la verdad es que en cuanto a salidas, hay poca historia. De hecho si suprimiéramos las que acabaron en el bar, se podrían contar con los dedos de una mano...
La segunda semana, después de la escapada que hicimos el Nen y yo a Poblet, y tal como se ve en las fotos, se puede comprobar lo de los bares que comenté anteriormente. Menos mal que nuestro corresponsal belga nos envió también fotos y pudimos ver ciclistas serios y no tragaldabas como nosotros...
En la tercera semana, aparte de las pachangas, aprovechamos la fiesta del día 15 para reunir un buen grupo, haciendo unas Olles y, por supuesto, almorzando. El domingo los "valents" se marcaron dos senderos con dificultad extra (a saber donde se metería Thais para acabar con esa cara).
La semana del 19 al 25, tengo muy poca información, así que pongo las fotografías disponibles
Y llegamos a la recta final. Para mi es una época del año que deja un gusto agridulce. Una semana en la que el almuerzo del Mariné en el Castell marca el final de la temporada de verano y el retorno a la rutina otoñal. Este año, al celebrarse tan pronto (el día 25) ha dejado unos últimos días del mes que pasaron sin pena ni gloria, con una sensación de melancolía y de pérdida que no sabría explicar.
