El martes tocó salida de senderos con división de opiniones, porque a Eric le encantaron, pero a Manolo no tanto. Tras hacer el Jabalí y el sendero de la cantera de Rifas (no dio tiempo de hacer Carlins porque se hacia tarde), una pausa para el bocata en el Peiró donde pude constatar que estoy mas muerto que vivo, entre el sudor, el cansancio y el calor asfixiante.
Llegó el jueves y aunque tocaba bar, me quedé en casa... Ya podéis suponer que muy bien no andaba, porque bueno soy yo para perderme un almuerzo.
Pep. Manolo y Eric hicieron una ruta por la zona de Vilanova y Escornalbou con parada en El Corral de Riudecanyes donde no comieron precisamente ensalada...
El sábado, Eric salió con Víctor, así que nos reunimos Pep, José Luis, Ramon (que ha vuelto de las vacaciones) y yo. Ruta por Riudecanyes, Trenet y Duesaigues con la intención de almorzar en Argentera en un bar recomendado por unos amigos de Ramon... Menuda decepción: 14,50 € por cabeza, incluyendo la tomadura de pelo de la semana, ya que nos cobraron un IVA ¡del 21%!, cosa en la que caímos cuando ya era tarde. En fin, un sitio en el que, por lo menos a mi, no volverán a verme el pelo.
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