Para que el año se nos de bien, es fundamental empezarlo con energía y buen humor, así que en este primer sábado día 2, conseguimos unir a los jubis y a José Luis, aunque no estaba muy claro si el viento nos iba a aguar la fiesta (y digo el viento porque el frio estaba asegurado).
Nos reunimos los cuatro en Riudoms y a buen ritmo hacia Almoster, ya que la intención es subir a Sant Pere y luego completar la ruta por el Camí del Rec de la Selva, que me lo recomendó un amigo.
De la subida a Sant Pere, que os voy a contar que no sepáis ya... Como siempre, o sea, una agonía casi de principio a fin. Se notan los turrones y los excesos alcohólicos de las fiestas. De hecho, me costó horrores llegar a la pausa del almuerzo en la ermita. Y menos mal que San Maginet reparó los desperfectos...
Tras un buen refrigerio, con su café calentito (que lujo!), continuamos por el camino del Puig d'en Cama. Camino, por decir algo... Solo hay que ver en las foto de los pobres desgraciados arrastrándose por esas cuestas (el Nen se cebó bien con los débiles, y como sube y baja el c....).
Bajada muy peligrosa hacia la zona del Rec y decepción mayúscula: uno de los senderos que, en teoría era de lo mas atractivo de la ruta, resulta que es camino particular... Y para más inri, el Camí del Rec parece que es solo para peatones (y ya se encargaron de recordárnoslo reiteradamente varios grupos de caminantes que nos encontramos).
En resumen, que al final decidimos atajar los últimos 2 km por la carretera (la verdad es que ya era muy tarde también) y tras despedirnos en Riudoms, una frenética carrera para llegar lo antes posible. A la una en casa. Por cierto, que en la riera que hay junto al polígono de la carretera de Alcolea en Reus, la rueda me escupió un pedrusco como el puño en toda la espinilla y me hizo un destrozo... Hasta el momento de escribir estas líneas, sigo cojo!
Unas fotos para el recuerdo:
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