Con la primavera que no acaba de llegar, vuelvo a salir con los Pancetas. Eso sí, dejé la bici pequeña y cogí la eléctrica.
Una ruta por la zona de Borges, Aleixar y Borges con anécdota incluida, porque después de subir por la alternativa al Hijo de p...(donde por cierto Jordi se acordó de toda mi parentela), se me ocurrió que podríamos hacer el sendero de Les Marranes. Hasta aquí todo bien, porque en sentido contrario es más ciclable, hasta llegar al cruce de senderos donde los tres giraron a la izquierda mientras yo, que no estaba seguro, fui a investigar recto. En resumen, que no nos entendimos y ellos terminaron arriba donde empieza el camino de los cortafuegos de Rocanys, mientras que yo les esperaba abajo a la salida de las Marranes. ¡Suerte de los teléfonos!
Un paro para tomar una cerveza en Castellvell, despedida de Anartz en Reus y hacia casa. Buena salida, como siempre.
Retoma la actividad ciclista y, aunque en principio tocaría pedalear en serio, me tomé fiesta y saqué la Wild.
Salida con mas fresco que calor, con subida hasta Rifàs y Les Olles, para terminar en el Maño, tomando un clásico con todos sus avíos (que podría ser de los últimos porque ya falta poco para que Rafa eche el cierre).
A la vuelta, tras perder al Nen nada mas salir del bar, un ultimo esfuerzo hasta Vilanova y Arbocet y todos para casa (unos mas deprisa que otros...😂)
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