Parece ser que se acerca el buen tiempo (dicen) pero el sábado de buena mañana, a tenor de las vestimentas de los cinco que nos reunimos, hacia frío como para ropa de invierno.
Una vez reagrupados todos en el cruce del Nen Perdut, enfilamos hacia la zona de Botarell y el inicio del ascenso a las Barritas, donde giramos hacia abajo por el Camí del Pont y a Riudecanyes por el camino de regantes. La sorpresa es que curiosamente deciden ir al Maño, a por los callos (y yo ya había comido el viernes, cabrones!!!!!!). En cualquier caso, buen almuerzo y buen rollo en la vuelta a casa. Solo hay que ver la foto en plan pescadores de ranas...
El domingo, aunque no vemos tanto el sol, hace mas calor y esta vez si que nos equivocamos los que nos vestimos de invierno. Solo faltó que durante un buen puñado de kilómetros, nos juntáramos con el grupo de Pere, lo que hizo que algunos lleváramos la lengua fuera durante un buen rato.
Y menos mal que empezando a subir las barritas (por el mismo sitio que ayer renunciamos), baje marcha, porque si no la tentación de volverme habría pesado más que las ganas de hacer kilómetros. Total, llegada a la cima del Pas chorreando como un pollo y con la alegría de que aún había que subir Les Costetes...
Pero bueno, poco a poco y a ritmo, al final se superaron los retos, con parada de foto incluida (esta vez sí!). Fotos no, fotos y no veas que fotos... Y os juro que todavía no habíamos bebido nada!
No hay comentarios:
Publicar un comentario