Domingo con una humedad terrible que, subiendo a los miradores de Les Borges nos ha hecho sudar de lo lindo. Hay que destacar en cualquier caso, que el jodio Jaume ha conseguido subir íntegramente la rampa de antes del mirador de Alforja! La primera vez que sube y lo consigue, increíble.
Unas fotos haciendo posturas en la zona de picnic y bajada hasta Aleixar por el camino de la Feredat y el de Sant Antoni i tras pasar por Els Cinc Camins, donde hemos coincidido con Rubén, despedida a Jaume a las 11. Hoy no hubo "morros".
Tras una noche movida, con fuertes aguaceros, la mañana salió insegura. De hecho, a las 7,30 tuvimos que posponer la hora de salida, pus aun caía algún chaparrón.
Arrancamos a las 8 Eric i yo y a las 8,30 nos reunimos con Pep que, por cierto, venia con el chubasquero puesto y con un poco de retraso (en efecto, olvido de la batería 😆) y enfilamos hacia Riudecanyes con la intención de almorzar en Can Lluis. Eso si, primero me hicieron un tour por el Mas del Cases que me dejó baldado y chorreando de sudor...
Y ya en el bar, nuestro gozo en un pozo, pues estaba aquello a reventar. El mismo Lluis ya nos dijo que la cosa iba para largo así que, recordando que el martes nos encontramos con el grupo de Jaume Pinyol en el bar El Café de Vilanova (el que está en la terraza sobre la plaza de la fuente, decidimos probar a ver que tal. Y la verdad es que el sitio está muy bien, buena sombra, buena comida, buen trato. Si se ha de sacar algún defecto, quizá algo carillo, pero que le vamos a hacer.
Con el Pep ausente, ejerciendo ya de abuelo a tiempo completo, decidimos repetir en el Maño, para que Eric recuperara el día que le tocaron rebajas. Buen almuerzo y buena sobremesa y hasta una prolongación de la ruta por la zona de Vilanova y Riudecanyes después de comer. Y fotos divertidas, con Manolo sonriendo muchísimo!!!!
Cumplimos la ilusión de Eric de hacerse la foto clásica con el Pont del Diable como fondo. La ida, por Constantí y vado del rio, que por cierto, a pesar de la sequia, todavía baja con un buen palmo de agua y parada para un refrigerio en la zona de picnic.
Tras las fotos de rigor (muy bonitas, por cierto), continuamos ruta por el camino del Mas de L'Arc i Mas del Pastor hasta Els Manous, donde en principio tenia pensado iniciar la vuelta. Pero como era todavía pronto, continuamos hasta el mas de Rafel y luego subida (bastante mala por cierto tras las lluvias) hasta El Gurugú y zona del Llorito hasta el cementerio de Tarragona.
En resumen, una ruta muy completa y, a pesar del calor que hacia, bastante sobrellevable gracias a la sombra que brindan los bosques de Tarragona. Ah, por cierto, recordando viejos tiempos, nos tomamos un par de cervezas bien frescas en Vilaseca, con sus tapas incluidas (recordais los chinos?)
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